Rimas, trabalenguas y adivinanzas específicamente elegidas para niños de 3 a 6 años o para niños con discapacidades lingüísticas por ser breves, fáciles y divertidas, recomendando siempre su repetición ayudando así a conseguir los objetivos pedagógicos. Para enseñar a los niños a recitar los trabalenguas se comienzan leyendo muy despacio y a medida que pronuncien correctamente ir añadiendo velocidad en las repeticiones